La popularidad de las redes sociales en la actualidad hace que la sociedad en su conjunto se vea muy influencia por los personajes más relevantes que aparecen en ellas, aquellas que acumulan miles de seguidores en sus cuentas. En algunos asuntos, sobre todo en los que han sido considerados tabú durante mucho tiempo, se abren a una nueva libertad en la que estos Influencers consiguen que muchos ciudadanos normalicen situaciones que antes procuraban cierto temor por el qué dirán, como es el caso del divorcio.
No hay duda de el gran influjo que ha tenido internet en la vida de las personas. En la forma en que trabajan, la forma en que se comunican, la forma en que reciben la información e incluso en la forma de relacionarse y encontrar el amor. No obstante, también ha tenido un importante peso en la forma de separarse, alejarse de esas relaciones que ya no hacen bien o incluso en el modo de tramitar un divorcio.
¿Cómo influye en el divorcio el hecho de que cada vez existan más influencers que condicionan el comportamiento de los demás?
Antes, hace apenas unas décadas, el divorcio era algo muy íntimo que no trascendía del entorno más cercano al matrimonio. Era para muchas familias algo de lo que avergonzarse, motivo por el que muchas parejas infelices seguían juntas haciendo vida de casados, a pesar de que su vida se había convertido en poco menos que un infierno.
Ahora, en cambio, es normal que los Influencers, entre otras cuestiones de su vida cotidiana, compartan en redes sociales sus cosas buenas y sus cosas malas. En este sentido, igual que comparten su boda idílica y otras personas desean tener un enlace similar, también, en ocasiones, con el divorcio, los Influencers pueden hacer que sus seguidores se condicionen hacia esta decisión cuando el matrimonio no funciona.
En realidad, es algo muy positivo. Del mismo modo que para alguien que quiere casarse, y encuentra en ellos el modelo de boda que quiere, para alguien que no es feliz en su matrimonio, está bien que pueda tener referentes visibles socialmente que hacen que estas situaciones se asimilen con total normalidad.
De este modo, las redes sociales marcan tendencia, es como si fuera una moda o estilo de vida que parece que, al verla en los demás, se toma fuerza para tomar decisiones similares a las que se perciben alrededor. La mayor tendencia en estos momentos es contactar con Abogados de divorcio express, por ser el más ágil y cómodo para las partes implicadas. Se recomienda trabajar con abogados especializados en procesos de divorcio de mutuo acuerdo, como los de Divorcionetas.
Quiero divorciarme, pero no tengo dinero. ¿Qué puedo hacer?
Quiero divorciarme, pero el problema es que no tengo dinero”. Sigue siendo una de las excusas más habituales para prolongar un estado civil que no resulta positivo para nadie. Con Divorcionetas, despacho que destaca por su publicidad en furgonetas rotuladas de divorcio de mutuo acuerdo a 150 euros por cónyuge, las consultas son totalmente gratuitas, pudiendo encontrar una solución que es más fácil y económica de lo que en principio pudiera pensarse.
Querer separarse o divorciarse no es algo bueno o malo en sí mismo, sino en ocasiones necesario. En cualquier caso, lo mejor es divorciarse de mutuo acuerdo, pues es más rápido, económico y menos traumático. Además, si no se cuentan con medios económicos, se puede estudiar la posibilidad de solicitar un abogado de oficio.
¿Qué es Divorcionetas?
Se trata de un despacho de abogados que se siente orgulloso de ofrecer a sus clientes un asesoramiento especializado y de calidad para que cualquier persona que necesite divorciarse, pueda hacerlo.
Su objetivo es facilitar el acuerdo amistoso, reduciendo al máximo el dramatismo de las rupturas, especialmente cuando hay menores de edad implicados. La prioridad siempre ha de ser el bienestar y la protección de los hijos. En este sentido, el divorcio debe estar al alcance de todos, pues no es capricho, es una necesidad. No hay matrimonio libre si el divorcio no está contemplado como una opción accesible.
El asesoramiento
Una familia que se sienta libre y esté correctamente asesorada por profesionales es la única que está capacitada para tomar decisiones conscientes, sin coacciones. Hay que cambiar la mentalidad y el concepto anticuado de divorcio igual a enfrentamiento. Hay que tener la conciencia y la madurez suficiente como sociedad para casarse y divorciarse con valores.
El problema principal que existe en España es la incultura acerca del matrimonio, pues son pocas las personas que deciden asesorarse con antelación de los derechos y obligaciones que van acumulando desde que dan el paso de casarse. En este sentido, las parejas solo suelen acudir a los abogados cuando aparecen los conflictos.
Con un asesoramiento antes, durante y después del matrimonio, y en su caso el divorcio, se evitan conflictos por decisiones equivocadas por falta información. De esta forma, se dota de seguridad jurídica a las relaciones familiares que de manera libre y consciente toman cuerpo, a sabiendas de sus derechos, obligaciones y consecuencias legales.
Con un asesoramiento prematrimonial se pueden prevenir divorcios y conflictos, pero cuando ya es tarde, de lo que se trata es de facilitar los divorcios a todo aquellos que lo necesiten, de mutuo acuerdo, pues es más pacífico, rápido y económico.
El abogado de divorcio es un profesional que establece una relación confianza para que exista una buena comunicación entre los cónyuges. Con esta ayuda, se establecen los criterios y las maneras para que no salgan perjudicadas ninguna de las partes, garantizando siempre el bienestar de los menores, en caso de haberlos.
